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Fernando García Cruz

Fernando es un chico acogedor con todo el mundo. Sus buenas notas y su personalidad le han convertido en el chico más popular de la clase. Siempre mantiene la calma, buscando ser racional.

Ficha de alumno

Nombre: Fernando

Apellidos: García Cruz

Año de ingreso en el centro: 2015

Edad: 15

Fecha de nacimiento: 27/06/03

Nombre del padre: Víctor García Torrelavega
 

Profesión: Diseño de aeronaves
 

Nombre de la madre: Beatriz Cruz Rodaballo
 

Profesión: Psicóloga forense
 

Número de hermanos: Roberto García Cruz (12 años)
 

Otros miembros del hogar familiar: 0

Datos médicos y/o psicológicos: Es propenso a resfriarse y tiene alergia al polen. 

Observaciones: Es un alumno bastante aventajado que aunque no sabe hacia dónde encaminarse, no deja de lado los estudios. Es de los más populares, aunque no parece muy atraído por esa fama.

Le gusta jugar al Fifa, ver series y pelis de mayores y los cómics españoles.

Historia

¿Sabéis lo que es ser el ser hijo de eminencias? Mi padre es diseñador de aeronaves y mi madre es psicóloga forense. Ambos unos prodigios en su área. Para ellos, estudiar es muy importante, pero más lo es hacer contactos. Por eso desde muy pequeño han escogido a mis amistades me gustase o no. Rezan el mantra de que uno mismo es lo más importante y que por eso hay que sacrificar cierta parte del ego en pos de conseguir favores cuando se necesiten. Por eso me obligaron a llevarme bien con Joaquín y Gabriel. La madre de Joaquín trabaja en el ayuntamiento, la de Gabriel es actriz de doblaje y su padre animador. A priori no puede parecer mucho, pero los padres de Gabriel se mueven por ámbitos de bastante caché y conocen a gente importante que podría servirme en un futuro. ¿Nicolás? Él vino en el pack junto a Gabriel. Además, mis padres son amigos de los suyos, así que es evidente que necesiten que yo me lleve bien con sus hijos, además de por lo dicho. Supongo que tengo que agradecer que no decidieran hacerse amigos de los padres de Iván, que trabajan en televisión o de Paula, cuya madre lleva una famosa marca de ropa. —Aunque no es descartable que deba hacerlo en algún punto. Aún queda bachillerato por delante—.

Me dan libertad de estudio. Siempre y cuando vaya a la universidad y escoja una carrera con cierto status, les sirve, así que en ese flanco tengo algo de poder de decisión, aunque personalmente me de lo mismo a qué dedicarme.

He crecido con el «oír, ver y callar» a la orden del día, así como con la frialdad y autoridad de unos padres que me han ignorado cuando he dado mis opiniones o me he salido de lo establecido por ellos. También he visto cómo mi hermano pequeño ha vivido con mucha más libertad que yo y aunque nunca he podido ponerle remedio, siempre he odiado que mi vida terminase de este modo.

Sé que no soy más que la marioneta de mis padres y que he crecido con una personalidad impuesta, con una máscara que me ha hecho olvidar quién soy. Y noto la rabia acumularse en mi interior, noto el asco y repulsión de tener que sonreír cuando no quiero, de tener que estar con amigos que realmente no considero como tal. Odio cuando Joaquín juega y juega importándole una mierda el resto. Odio cuando Gabriel y Nicolás hablan entre ellos dándole igual que los demás se sientan fuera. Pero tengo que sonreír y aguantarme. Debo mantener mi reputación y continuar siendo el más popular de mi clase. El más listo.

«¿No te interesa esa chica, Rocío?», me preguntó mi madre una vez y supe de inmediato lo que pretendía: uno de sus padres es youtuber, gana mucho dinero y tiene contactos. Ella es inteligente y en ocasiones incluso supera mis notas. ¿Qué mejor persona para intentar encandilar? Sé lo que siente por mí y no me costaría en absoluto empezar una relación, pero no quiero que ocurra. No me gusta. Tengo que fingir que sí y con mis amigos alego a la timidez para no tener que llevar a cabo los designios de mi familia, pero será inevitable. Al final tendré que salir con ella hasta que aparezca alguien mejor.

Porque al final todo son negocios, nunca se trata de uno mismo, aunque mis padres digan que sí. Para ellos obtener la mayor ventaja es sinónimo de felicidad y, por lo tanto, ese pensamiento también debe convertirse en el mío. Aunque lo odie. Aunque quiera salir corriendo, gritar y golpearme contra una pared hasta perder el conocimiento.

Si existiese alguna manera de escapar de esta vida, de cambiarla, de vivir como quiero… me agarraría a ella con uñas y dientes.

© 2023 by Gini-Gini
Los nombres y lugares son inventados. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.
No recomendada a menores de 15 años.

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